Syra Jiménez Pajarero y sus Regalos
Debo decir que me siento Afortunada.
A pesar de los sinsabores que, de cuando en cuando, la vida ha tenido a bien regalarme, soy Afortunada. Incluso después de resistir esta horrible crisis que asola el país, disgustarme por la dirección que toma la política, cercana y lejana, aborrecer los intereses de la curia política y financiera, reprochar con ímpetu los criterios de los dirigentes… soy Afortunada. Y sé que lo soy porque soy también una mujer consciente de que la fortuna me dispensa mucho más de lo bueno que de lo malo. Pequeñas y grandes cosas, momentos. Reír con ganas cada día, respirar aire puro, contemplar que la vida alrededor continúa conmigo dentro, degustar viandas elaboradas con cariño a diario, disfrutar el crecimiento de mi hijo mes a mes, conversar con mujeres de casa temas únicos, personales, privados y esenciales cada domingo, sentir que me ama incondicionalmente, infinitamente. Soy Afortunada.
Y además, están los presentes excepcionales que me ratifican en esa i…
A pesar de los sinsabores que, de cuando en cuando, la vida ha tenido a bien regalarme, soy Afortunada. Incluso después de resistir esta horrible crisis que asola el país, disgustarme por la dirección que toma la política, cercana y lejana, aborrecer los intereses de la curia política y financiera, reprochar con ímpetu los criterios de los dirigentes… soy Afortunada. Y sé que lo soy porque soy también una mujer consciente de que la fortuna me dispensa mucho más de lo bueno que de lo malo. Pequeñas y grandes cosas, momentos. Reír con ganas cada día, respirar aire puro, contemplar que la vida alrededor continúa conmigo dentro, degustar viandas elaboradas con cariño a diario, disfrutar el crecimiento de mi hijo mes a mes, conversar con mujeres de casa temas únicos, personales, privados y esenciales cada domingo, sentir que me ama incondicionalmente, infinitamente. Soy Afortunada.
Y además, están los presentes excepcionales que me ratifican en esa i…